Hablar de Vetusta Morla es hablar de un sonido inconfundible, de letras que se clavan en el alma y de directos que se sienten como un viaje emocional. Y en el No Sin Música Festival, los madrileños reafirmaron por qué son una de las bandas más importantes del Indie Rock en España.
Desde el primer acorde, el público se entregó por completo. Con una puesta en escena sobria pero arrolladora, desplegaron su arsenal de himnos, arrancando ovaciones con «Maldita Dulzura», la nostálgica «23 de junio» y la enérgica «Valiente». Cada canción, coreada a pulmón por los asistentes, convertía el recinto en una comunión entre banda y público, algo que Vetusta Morla domina con maestría.
El momento más especial de la noche llegó con «Los Días Raros», cuando se unió al escenario Nina de Juan, vocalista de Morgan, para interpretar juntos este tema icónico. Un broche de oro cargado de emoción que puso la piel de gallina a más de uno.
Como cabezas de cartel, Vetusta Morla no solo cumplieron con las expectativas, sino que las superaron con creces. Su madurez escénica, su conexión con la audiencia y su impecable ejecución musical convirtieron su concierto en uno de los momentos más memorables del festival.